Así lucía el LV-JNR cuando se accidentó en Bahía Blanca (perfil: Gonzalo Carballo).
La historia de este modelo en Argentina se inició en 1967 cuando las compañías Austral Líneas Aéreas y Aerotransportes Litoral Argentino (A.L.A.) incorporaron el modelo más pequeño BAC One Eleven 420EL, con capacidad para 74 pasajeros, dando el gran salto tecnológico a la era del jet. Para reforzar su flota, en 1969 se encargan directamente a la fábrica British Aircraft Corporation (B.A.C.) tres ejemplares con capacidad para 102 personas. Eran épocas en las que se adquirían máquinas nuevas, por lo que a los One Eleven Series 500 argentinos, la fábrica les asignó el número de modelo 521FH, exclusivo para ALA-Austral.
El protagonista de esta historia es el número de serie 192 y realizó su primer vuelo el 15oct69 con registro provisorio inglés G-16-7, siendo el primero de la serie. Recibió el registro LV-JNR y fue entregado el 21nov69, llegando al país dos días después. El 27nov69 realizó su primer vuelo regular, decorado exteriormente con los colores rojo y negro de Austral.
El 17sep70 fue arrendado a SADIA con el registro PP-SDP (esta aerolínea era la antecesora de TransBrasil), llevando los colores de Austral y títulos de la compañía brasilera, con el particular detalle de pintar sobre la bandera argentina los colores rojo, blanco y negro, asemejándola a la bandera de Egipto. El 08ene71 la nave retornó a la empresa argentina y fue nuevamente registrada LV-JNR.
El 17abr71 es alquilado por seis meses a empresa inglesa Court Line con matrícula G-AYXP, siendo bautizado “Halcyon Bay” y recibiendo nuevas modificaciones en su esquema de pintura. Fue devuelta el 14oct71.
En 1972/73, Austral revoluciona el ambiente local al renovar su imagen empresaria aplicando diferentes colores a cada aparato, con evidentes influencias de Braniff International y Court Line (de líneas bastante similares al esquema de Austral). Al LV-JNR le asignan las gamas de colores que van del magenta (color más claro) al rojo (tono más oscuro), similar a los colores aplicados al BAC One Eleven 420EL LV-IZS (aunque en este caso el color más oscuro era rosa o magenta y no rojo).
El 4dic73, cumpliendo el vuelo AU-810 (BUE – BHI – REL), en el despegue desde la Aeroestación Civil Comandante Espora en Bahía Blanca (BHI) y debido a una aparente pérdida de potencia el avión toca nuevamente pista ya con el tren de aterrizaje en proceso de retracción.
Al tocar pista nuevamente se revientan todos los neumáticos, ya que los mismos estaban frenados debido al proceso de retracción del tren de aterrizaje, desprendiéndose el conjunto de aterrizaje principal izquierdo. El avión se desplazó en forma lateral sobre el pasto arrastrando a su paso unas cadenas que se encontraban al costado de la pista 16-34 y sufriendo roturas en ala izquierda que perforaron el tanque de combustible provocando un principio de incendio. Esas cadenas (retiradas de viejos buques) eran utilizadas para sostener los cables de frenados que se utilizaban en la Base Aeronaval Comandante Espora para los Douglas A-4Q Skyhawk y Grumman S-2 Tracker de la Aviación Naval en prácticas de aterrizaje en portaaviones (además de emergencias).
Detalle de las cadenas que rompió el LV-JNR a su paso
La punta del ala fue seccionada por una de las cadenas dispuestas a la vera de la pista 16-34 de la Base Aeronaval Comandante Espora
No hubo que lamentar víctimas entre las 74 personas que viajaban a Trelew (REL), el único herido fue el chofer de un camión de combustible que se hallaba estacionado en el sector de abastecimiento de la Base Aeronaval Comandante Espora a 450 metros de distancia quien resultó lastimado cuando un eslabón de la cadena que rompió el ala del avión impactó y perforó la puerta del camión.
Al momento del accidente la máquina contaba con una actividad total de 10.850 horas y 10.292 ciclos.
Huellas sobre el pasto dejadas por el Bac One Eleven que muestran un desplazamiento lateral.
Aparte de las roturas en el ala con principio de incendio y daños en la panza del avión, el fuselaje quedó torcido y levemente hundido en su parte inferior. Se evaluó la posibilidad recuperar la aeronave pero debido al alto costo de reparación se resolvió darla de baja... en esa época no existían en el país procedimientos adecuados de reglaje total en máster de fábrica (rigging).
Imágenes en colores tomadas por Rómulo Pastraro.
La máquina fue trasladada al Taller Aeronaval Central (T.A.C.) de la Armada, en las inmediaciones del aeropuerto, y entre los meses de agosto/septiembre de 1977 durante 40 días la aeronave fue progresivamente desguazada. Las partes utilizables fueron recuperadas, identificadas y etiquetadas, siendo enviadas a Buenos Aires en aviones de línea y en el carguero Curtiss C-46 LV-FSA, hasta que finalmente solo quedó el fuselaje, que fue vendido a “chatarreros” ese mismo año.
Si bien este BAC tuvo una corta vida en la empresa (los dos aviones restantes adquiridos en 1969 volaron con Austral hasta los años noventa), fue el de más actividad en sus primeros años, volando en tres compañías diferentes (Austral, SADIA y Court Line).
Foto digital del Diario La Nueva Provincia publicada al día siguiente del accidente.
Fuentes: Aerotransport, Diario “La Nueva Provincia”, “Airlines & Airliners Bac One Eleven” Phil Lo Bao TAHS.
Colaboró: Carlos Abella.