Un Jumbo futbolista

El Boeing 747-287B LV-OOZ, cn 22592/532 fue recepcionado por Aerolíneas Argentinas el día 28 de agosto de 1981, estaba equipado con cuatro motores Pratt & Whitney JT9D-7Q.

La máquina, luego de haber acumulado una actividad general de 91.896 horas y 16.595 ciclos, fué dada de baja por el alto costo de operación y además porque debía ser sometida a una inspección “C” que resultaba ser antieconómica. Es así que desde abril de 2007 se encuentra aparcada en la zona de Chivatos, en Ezeiza.

Sin duda, uno de los más vistosos colores que recibió el avión le fueron aplicados en el año 2003, cuando entre los días 4 y 6 de noviembre de 2003 esta aeronave se detuvo en hangares de Ezeiza para colocarsele logos con la imagen del Club Boca Juniors y se lo preparó para realizar una gira hasta Japon -Narita- adonde el club argentino jugaría la final contra el Milan de Italia. En ese vuelo especial transportó a simpatizantes del equipo, invitados simples, periodistas, personal de la aerolínea hasta completar la totalidad del pasaje.
Sin embargo, los futbolistas habían viajado hacia el país nipón la semana anterior en otro Jumbo Jet de Aerolíneas Argentinas para aclimatarse.

El avión aterrizó en Japón el 13 de diciembre de 2003 y permaneció allí hasta el día 17, con rotundo exito debido a la imagen, todos los spoters querían tomar fotos de la aeronave.

El LV-OOZ en mantenimiento en Ezeiza con los capots de los motores abiertos (Foto: Jorge Debole).

Luego de su actividad deportiva, a partir del 1 de junio de 2004, el avión fué utilizado por Air Plus Comet en calidad de alquiler, pintado con los simplísimos títulos de la transportadora española y conservando el logo del condor en el estabilizador vertical, la única diferencia fue que le aplicó la matrícula EC-IZL.

Tiempo después, fue alquilado por una temporada a la empresa Aerosur de Bolivia para cumplir vuelos hacia Madrid. La máquina voló para esta aerolínea entre el 19 de diciembre de 2006 y el 11 de marzo de 2007.

Actualmente, descanza en Ezeiza, junto con sus sisterships.

Agradecimiento: Jorge Debole